Read the book: «Gobernanza china»

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ÍNDICE

PORTADA

CONTRAPORTADA

PRÓLOGO: Ilustrar el dao de la gobernanza contando historias

SECCIÓN I. ASUNTOS DOMÉSTICOS

1. HISTORIAS SOBRE EL GOBIERNO HONESTO: «LA CORRUPCIÓN DE LOS MANDOS DEBILITA AL GOBIERNO»

EL RECHAZO DEL ORO POR LOS CUATRO TESTIGOS

LA LUCHA ANTICORRUPCIÓNNO ES HOUSE OF CARDS

LOS FRUTOS DEL TRABAJO DEL PUEBLO

ADIÓS A MI CONCUBINA

UN FINAL ABRUPTO

PEI JU TUVO QUE ADULAR A LOS SUI, PERO PUDO CRITICAR A LOS TANG

LOS DE ABAJO IMITAN A LOS DE ARRIBA

APOYO POPULAR

LA OBSERVACIÓN DE HUANG YANPEI

EL HONESTO NO HABLA DE POBREZA, EL DILIGENTE NO MENCIONA LA DIFICULTAD

2. HISTORIAS SOBRE EL CARÁCTER Y LA MORAL: «GOBERNARSE A UNO MISMO ANTES DE GOBERNAR TODO LO DEMÁS»

MEDIA COLCHA

EL EMPERADOR KANGXI DESDEÑA AL HONGO LINGZHI

NO HAN DE AMBICIONARSE LOGROS TRANSITORIOS

EL GRAN AMOR DE LOS MAESTROS

A LA SOMBRA DE LA PAULONIA, JIAO TRANSFORMÓ SUS LÁGRIMAS EN LLUVIA

LA PODEROSA FUERZA DE LA CONVICCIÓN

«LO SALVAREMOS, INCLUSO SI HEMOS DE MENDIGAR PARA ELLO»

EL MÉRITO OCULTO DE GU WENCHANG

MARX LOGRÓ ESCRIBIR EL CAPITAL SUMIDO EN LA POBREZA

GOTA A GOTA SE HORADA LA ROCA

3. HISTORIAS INSPIRADORAS: «ESTUDIAR BENEFICIA AL TALENTO, AL IGUAL QUE AL AFILARLO MEJORA EL CUCHILLO»

ANDAR TREINTA KILÓMETROS POR UN LIBRO

POR QUÉ LA CIENCIA Y LA TECNOLOGÍA CHINAS QUEDARON REZAGADAS

¿Y A DÓNDE SE ME FUE EL TIEMPO?

LOS HÉROES SURGEN JÓVENES

LA JUVENTUD REVOLUCIONARIA

MANTENERSE AL DÍA CON LOS TIEMPOS

EL INFORME XUNWU

UN EPITAFIO DE 114 CARACTERES

RELEER CIEN VECES EL MANIFIESTO COMUNISTA

NI SER PESIMISTA, NI PERDER EL TIEMPO

EL RETORNO DEL HIJO PRÓDIGO

4. HISTORIAS SOBRE GOBERNANZA: «SE GOBIERNA CON HECHOS Y NO MEDIANTE FÁBULAS»

EL CONTRATAQUE DE LOS MÓVILES CHINOS

EL MILAGRO CHINO

¡QUE VIENE EL «GOBERNADOR»!

MADURAR UN SISTEMA DE GOBIERNO REQUIERE TIEMPO

EL CÓDIGO DE DISCIPLINA NO PUEDE SER UN PAPEL OLVIDADO EN EL CAJÓN

DOS SIGLOS PERDIDOS

EL LAMENTO DE ZHANG ZHIDONG

LA DISPUTA POR «EL SOMBRERO DE LA POBREZA»

«¿DE VERDAD ERES CHINO?»

NO HAY FUERZA SIN UNIDAD

LA TEORÍA DEL BURRO Y EL CABALLO

LA TEORÍA DEL BARRIL DE MADERA

LA TEORÍA DEL CAMOTE

POR QUÉ ARGENTINA PERDIÓ LA COPA MUNDIAL

SABER APROVECHAR EL TALENTO TAL Y COMO SE CONOCE LA VIRTUD DE CADA UTENSILIO

COMPRAR UN ESQUELETO DE CORCEL POR 500 TAELES DE ORO

RESPETAR A LOS MAYORES ES UNA GRAN VIRTUD

SECCIÓN II. ASUNTOS INTERNACIONALES

1. HISTORIAS SOBRE LA AMISTAD ENTRE LOS PUEBLOS: «LA AMISTAD ENTRE PAÍSES DESCANSA EN LA SIMPATÍA DE SUS PUEBLOS»

«BUENOS HERMANOS»

«UN MATRIMONIO DE ORO Y JADE»

DOS VIEJOS AMIGOS PERUANOS DEL PUEBLO CHINO

LOS SOLDADOS POR LA LIBERTAD AÚN CANTAN CANCIONES REVOLUCIONARIAS

UN GRUPO DE MADRES CHINAS Y AMOR DE ÁFRICA

EL INOLVIDABLE PROFESOR COLIN MACKERRAS

UN BRASILEÑO CON ALMA CHINA

UN RESTAURANTE ÁRABE EN YIWU

MEDIO SIGLO EN BUSCA DE SU MADRE

«SANGRE DE PANDA» PARA LOS AMIGOS CHINOS

EL GUSTO DE GANAR TODAS LAS MEDALLAS DE ORO

LA LUNA DE MIEL AFRICANA DE UNA PAREJA CHINA

2. HISTORIAS SOBRE LAS RELACIONES ENTRE PAÍSES: «LA ARMONÍA ES VALIOSA EN LAS FORMAS

LA AMISTAD SINO-IRANÍ EN LA RUTA DE LA SEDA

LA ESTATUA CONMEMORATIVA DE DENG XIAOPING

EL VERDADERO «HIERRO PAKISTANÍ»

MECÁNICA NEWTONIANA

«LA PROFUNDIDAD DE UN RÍO SE REMONTA A SU ORIGEN»

LA AMISTAD QUE FORJÓ EL TREN TAZARA

«LLAVES DORADAS» DE MUSCATINE

3. HISTORIAS SOBRE INTERCAMBIOS CULTURALES: «LAS COSAS NACEN PARA SER DIFERENTES».

EL PEQUEÑO TOPO CHECO

CHINA A OJOS DE UNIVERSITARIOS SINGAPURENSES

EN BUSCA DE SHAKESPEARE

UN TRAGO DEL MOJITO DE HEMINGWAY

SUTRAS AL LOMO DEL CABALLO BLANCO Y EL VIAJE AL OESTE DEL MONJE XUANZONG

EL HOGAR CHINO DE TAGORE

LAS RELIQUIAS ESMALTADAS DEL TEMPLO FAMEN

BREVE HISTORIA DE INTERCAMBIOS ENTRE CHINA Y OCCIDENTE EN LA RUTA DE LA SEDA

LA CANCIÓN DEL PRESIDENTE YUDHOYONO

LA AVENIDA XIAN XINGHAI

4. HISTORIAS SOBRE EMOCIONES COMPARTIDAS: «LA DISTANCIA NO ES OBSTÁCULO PARA LOS VERDADEROS AMIGOS»

EL BARCO DEL TESORO DE ZHENG HE EN SINGAPUR

EL AMIGABLE PASADO ENTRE CHINA Y ESTADOS UNIDOS

LOS SOLDADOS EXTRANJEROS DEL EJÉRCITO DE LA OCTAVA RUTA

LA HIJA DEL MARISCAL CHINO EN UN CAMPO DE CONCENTRACIÓN NAZI

LA LUZ DEL HUMANISMO ILUMINA LOS TIEMPOS OSCUROS

EL «TÉ CHINO» BRASILEÑO

5. HISTORIAS PERSONALES: UNA INTENCIÓN ORIGINAL INAMOVIBLE

LA MEMORABLE HANGZHOU

LA TRANSFORMACIÓN DE LIANGJIAHE

LA VELADA DE YINGTAI

EL CIELO AZUL DEL FORO DE COOPERACIÓN ECONÓMICA ASIA-PACÍFICO (APEC)

GULING EN EL CORAZÓN

EPÍLOGO: El buen narrador de historias chinas

CRÉDITOS

LID EDITORIAL PUBLISHING

Prólogo:

Ilustrar el dao de la gobernanza contando historias

SER UN BUEN narrador es una peculiaridad que comparten políticos y pensadores ilustres de todos los tiempos y lugares, así como una habilidad extraordinaria propia de los líderes del Partido Comunista de China (PCCh). En Yan’an, en la ceremonia de clausura del VII Congreso Nacional del PCCh, Mao Zedong narró El viejo que movía montañas ante los representantes políticos que acudieron. Cuenta la historia de un anciano que cada día se dedicaba incansable a excavar dos grandes montañas frente a su casa, y tanto era su esfuerzo que logró conmover al mismo Dios, el cual envió a un inmortal para que le terminase el trabajo. Tomándola como metáfora, el presidente Mao ilustraba así que el PCCh podía, gracias a su incesante perseverancia, remover montañas, pese a que su dios no era otro que el pueblo chino, y las dos grandes montañas a batir, el feudalismo y el imperialismo.

Xi Jinping es también un gran narrador, capaz de transmitir un hondo y conmovedor significado en todas sus apariciones públicas, ya sea en los discursos del congreso, charlas académicas, comparecencias internacionales o en los artículos que publica en los medios. Sus historias son vívidas y concretas, populares al mismo tiempo que profundas, imbuidas de la sabiduría y fuerza propias de China, mientras que reflejan una profunda conciencia humanista y una filosofía que caracterizan un brillante estilo de liderazgo.

Toda historia entraña un sentido. En 2013 y 2014, en las fiestas que conmemoraban la fiesta de la juventud del Cuatro de Mayo, Xi Jinping acudió a seminarios con los representantes juveniles, donde les contó cómo en sus años mozos, cuando fue enviado al campo para unirse a las brigadas de producción, andaba hasta treinta li (unidad de longitud tradicional china que equivale a 500 metros) para poder tomar prestado un libro, y poder leer una vez terminada la jornada pastoreando el ganado y cavando la tierra. Con esto los animaba, a través de su propio ejemplo, a aprovechar al máximo su tiempo dedicándolo al cultivo de uno mismo. En lugar de contar grandes narraciones históricas de famosos personajes, el presidente recurrió a su propia experiencia para transmitir de un modo mucho más honesto, vívido e influyente la importancia del esfuerzo y el estudio.

El People’s Daily publicó cierta vez un artículo titulado «El sabor de la fe», donde se recogía la anécdota de cuando Chen Wangdao tradujo el Manifiesto Comunista. Cuentan que estaba tan inmerso en su trabajo que un día confundió el azúcar bermejo con la tinta negra, bebiéndosela sin querer, metáfora al cabo del dulce sabor del espíritu y la convicción comunista. Es una anécdota conmovedora de la historia del Partido a la cual el presidente Xi recurre en numerosas ocasiones para alentar a sus cuadros a mantenerse fieles a sus ideales y convicciones.

El 27 de marzo de 2014 se celebró en París un encuentro para conmemorar el 50 Aniversario del Establecimiento de Relaciones Diplomáticas entre China y Francia, y Xi Jinping volvió a hacer uso de su ingenio narrativo; en su discurso alegó que «Una vez Napoleón comparó a China con un león durmiente, un león que cuando despertase haría temblar al mundo entero. Pero —continuó— hoy el león ha despertado y comprobamos que es pacífico, amigable y civilizado». Utilizando audazmente esta significativa historia, desmontaba la teoría de la «amenaza china» y transmitía en cambio al mundo el verdadero valor del sueño chino.

Tal como decimos, «una buena historia duplica el resultado con la mitad de esfuerzo». En nuestra rica tradición, tanto las leyendas populares como las de diversas escuelas filosóficas han ido tejiendo una vívida trama. Son historias atemporales que traspasan lugares, influyendo en la vida y el pensamiento de innumerables generaciones. Contar historias es tremendamente efectivo, precisamente porque las historias son capaces de establecer al instante una relación emocional entre el narrador y su audiencia, produciendo una respuesta empática en la conciencia. Los detalles particulares tienen más poder persuasivo que los conceptos abstractos; no obstante, ni la más consumada técnica narrativa puede equipararse con un sentimiento real para conmover a la audiencia.

Los antiguos decían que la literatura era el vehículo del dao (que significa «vía», «verdad», «sentido»). Los relatos de Xi Jinping, tanto para audiencias extranjeras como nacionales, están imbuidos del dao de nuestra tradición histórica, del dao de la reforma y apertura, del dao propiamente chino de participar en la gobernanza del mundo y la forja de una comunidad armónica junto al resto de países. Con ese estilo que hace inteligible lo profundo, ilustra el dao conduciéndonos sistemáticamente hacia una conciencia de su significado. En el país, comunica las políticas del Partido de una forma tal que penetran en el corazón de la gente, usando un tipo de lenguaje cercano que consigue crear consensos sobre las reformas necesarias. En la escena internacional, hace uso de esos nuevos conceptos, categorías y expresiones en boga, inteligibles para todos, de forma que las ventajas del desarrollo de China, así como sus potencialidades, se transformen asimismo en una fuerza discursiva. Esta es la razón por la cual los relatos de Xi Jinping son tan fascinantes y provocadores, haciendo despertar el pensamiento general.

ILUSTRAR EL DAO DE LA CIVILIZACIÓN CHINA A TRAVÉS DEL CONTAR DE SUS HISTORIAS

Xi Jinping lo transmite recurriendo al vasto y rico material que atesora nuestra tradición, siendo este su principal estilo de gobernar. Tal y como él ha señalado en múltiples ocasiones, «la historia es la fuente primordial del presente, el hoy de cualquier país proviene de su ayer. Tan solo cuando comprendemos de dónde proviene una nación somos capaces de comprender cómo es ahora, y solo entonces podemos vislumbrar hacia dónde se dirige». A menudo recurre al pasado en forma de fábulas o parábolas antiguas, mitos tradicionales y episodios históricos para interpretar ingeniosamente la realidad actual, con la esperanza de que la gente pueda aprender de ellas para cultivarse y adquirir la sabiduría necesaria para desempeñar un buen trabajo. Por ejemplo, en una velada en Zhongnanhai con el entonces presidente estadounidense Barack Obama, Xi le refirió la historia del lugar en el que ambos se encontraban, la isla Yingtai: «Este espacio —le dijo— ha sido testigo de numerosos eventos históricos. El emperador Kangxi de la dinastía Qing implementó aquí las políticas destinadas a pacificar la revuelta civil de Taiwán y recuperarla de manos de los partidarios de los Ming; siglos después, en tiempos del emperador Guangxu, cuando el imperio Qing comenzaba su declive, decretó los Cien Días de Reforma (1898), pero fue derrotado y aprisionado aquí mismo a manos de la emperatriz Cixi». A lo que el presidente Obama observó emocionado: «La historia de nuestras dos naciones comparten este aspecto: ambas han experimentado que las reformas siempre encuentran resistencias, es una recurrencia histórica ante la cual debemos ser valientes», y Xi Jinping contestó: «Es sumamente importante conocer la historia reciente de China para comprender hacia dónde quiere encaminarse y cuáles son sus ideales presentes».

ILUSTRAR EL DAO DEL DESARROLLO CHINO A TRAVÉS DE RELATOS

A partir del XVIII Congreso Nacional del PCCh, el Comité Central que Xi Jinping lidera como secretario general ha formulado nuevos conceptos, nuevas ideas y estrategias para la gobernanza de China. Los relatos a los que Xi Jinping recurre para transmitirlos constituyen su máxima expresión. Sus discursos logran formular consensos y despejar equívocos gracias a sus historias, en donde aporta ejemplos y recurre a los hechos, popularizando así teorías complejas, y haciendo que su profundo sentido sea fácil de entender. Por ejemplo, recurrió a su propia anécdota de nado en Xiamen, allá por la década de los ochenta, para ilustrar cómo, para cruzar el «río» de las reformas, se requería conocer bien la naturaleza del agua, reforzando con ello la idea de que tanto la planificación técnica al más alto nivel, como la experiencia de ir palpando todas y cada una de las piedras del río, son ambos métodos fundamentales para implementar el desarrollo. También relató sus memorias de Liangjiahe, de sus tiempos en la provincia de Shaanxi, para ilustrar su afecto por los movimientos de base y hacer hincapié en la necesidad de no olvidar la intención original de las reformas: «Nosotros los miembros del PCCh nos debemos enteramente a la gente común, a ella le debemos nuestra supervivencia, y por tanto debemos tener siempre en mente que nuestro propósito es servir al pueblo en cuerpo y alma. Debemos recordar que somos servidores públicos y defender a toda costa sus intereses y necesidades fundamentales».

ILUSTRAR EL DAO DE LA DIPLOMACIA DE UNA GRAN NACIÓN A TRAVÉS DE LA NARRATIVA

Con simplicidad y afecto, conciso pero profundo, Xi Jinping hace uso de la palabra en la escena internacional con una frescura literaria y un encanto personal tales, que se ha convertido ya en su marca distintiva entre los círculos políticos extranjeros. Conceptos propios de la diplomacia china tales como el sueño chino, la cooperación recíprocamente ventajosa, su visión del beneficio justo y de la seguridad en Asia, o el destino común humano y el desarrollo pacífico, se trasmiten en sus discursos por medio de elocuentes historias y relatos, fáciles de entender y recordar, de propagar y compartir. En el discurso que dio ante el Gran Jural Estatal de Mongolia el 22 de agosto de 2014, contó: «China desea dotar a Mongolia y demás países circundantes del espacio y las oportunidades favorables para un desarrollo conjunto. A todos damos la bienvenida a bordo de nuestro tren, ya sea en el de alta velocidad o en la línea regular que va haciendo autostop, pues bien dice el refrán que si quieres ir rápido, ve solo, si quieres llegar lejos, camina acompañado». Y así, con audacia y humor, se apropiaba de la expresión «hacer autostop», que en ciertos círculos había tomado un matiz despectivo y burlón para referirse a China, transformándola para comunicar así su ideal diplomático de una cooperación recíprocamente ventajosa.

Dice el filósofo que aquel que mediante sus relatos sea capaz de ganarse el favor del público, será quien domine el poder del discurso. Tanto la historia como la realidad muestran que los gobernantes versados en la historia de su país, así como buenos conocedores de las tendencias culturales globales, son extraordinarios contando historias capaces de trasladar de forma sencilla los complejos principios de gobernabilidad a propios y extraños, de tal forma que la gente los comprenda y comparta. Solo así puede convertirse en un excelente capitán, guiando al país a través de torrentes peligrosos, conduciéndolo hacia la orilla victoriosa.

Cuanto más lejos sea uno capaz de ver en el pasado, más lejos vislumbrará el futuro. La teoría es gris, pero los relatos están llenos de color y, como dice el refrán, «el dao emerge de una raíz consolidada». Nuestra pretensión con la publicación del presente volumen, que recopila las historias de Xi Jinping en todo tipo de apariciones, es mostrar a los lectores el arte de forjarse el favor del público mediante el conocimiento, así como el dao de la gobernanza que subyace al contar historias. Ojalá estos relatos sean cada vez más espléndidos y no dejemos de escribirlos juntos.

Yang Zhenwu, director del People’s Daily


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Historias sobre el gobierno honesto: «la corrupción de los mandos debilita al gobierno»

EL RECHAZO DEL ORO POR LOS CUATRO TESTIGOS

Una de las historias famosas en China es la de Yang Zhen, un oficial de la dinastía Han del Este al que ordenaron transferir desde la prefectura de Jingzhou hasta la de Donglai. A su paso por Changyi, de camino para asumir el cargo, el gobernador del condado Wang Mi, que había accedido al puesto gracias a la ayuda y recomendación de Yang Zhen, fue a visitarlo en el día con las manos vacías, pero por la noche, quiso pagarle sus favores regalándole diez taeles de oro, diciéndole: «Ya es tarde y está oscuro, nadie lo sabrá», a lo que Yang replicó: «El cielo lo sabe, la tierra lo sabe, yo lo sé, tú lo sabes: son cuatro testigos, ¿cómo te atreves a decir que nadie lo sabrá?». Al oírlo, Wang Mi se sintió avergonzado.

Yang Zhen siempre fue un oficial recto y honesto, cuando sus mayores y amigos le recomendaban adquirir propiedades para sus descendientes, replicaba: «A ellos les dejaré en herencia el título de Descendientes de un Oficial Incorruptible, y ¿acaso no es este el mejor de los legados?». Verdaderamente, esta es la conciencia de la honestidad.


[Discurso en la Séptima Sesión Plenaria de la XVIII Comisión Central del PCCh para la Inspección Disciplinaria (6 de enero de 2017).]

Comentario

China cuenta en su tradición con numerosas historias sobre oficiales insobornables. Por ejemplo, Yang Xu ahogó al pez que sus subordinados le regalaron como rechazo a todo tipo de soborno, Zihan valoraba por encima de todo la rectitud, Kong Fen rechazó lucrar cuando fue destinado a una zona con una rica economía, y Bao Zheng no se llevó siquiera la piedra de la tinta cuando abandonó su cargo. De igual forma, la historia de Yang Zhen, conocida como «El rechazo del oro por los cuatro testigos» y su irreprochable conducta para con sus descendientes, perdura en nuestra memoria.

Yang Zhen, cuyo nombre de cortesía era Boqi, nació en Huayin, provincia de Shaanxi, y fue un renombrado letrado de la dinastía Han del Este. Se integró en el ámbito político a los cincuenta años, alcanzando finalmente una posición entre los tres más altos oficiales del estado. Durante toda su carrera se mantuvo recto e insobornable. La anécdota aquí referida aparece originalmente en El libro de los Han tardíos. Biografía de Yang Zhen, donde se atestigua: «Yang Zhen era tan justo e imparcial que siempre rechazaba favores personales. Sus hijos y nietos comían verduras a menudo y salían descalzos. Venerables ancianos le recomendaban adquirir propiedades, lo que reclinaba diciendo “A mis sucesores dejaré en herencia el título de Descendientes de un Oficial Incorruptible, ¿y acaso no es este el mejor de los legados?”».

Debido a esta anécdota, en generaciones venideras se le conoció como «Don Yang de los Cuatro Testigos» o «Prefecto Jefe de los Cuatro Testigos» o bien «Míster Cuatro Testigos»; asimismo, la sala ancestral en cuyo honor se llamó Sala de los Cuatro Testigos se conservó en el palacio gubernamental de Laizhou hasta la dinastía Ming. El poeta de la dinastía Tang Hu Ceng alabó su conducta en su poema histórico La tierra al oeste de Hanguguan: «El espíritu de Yang Zhen yace en las umbrías colinas de Mang, en las desoladas tierras al oeste de Hanguguan, pero la reputación que ganó con sus cuatro testigos perdurará en el mundo, eterna será junto al cielo y la tierra».

Yang Zhen no solo llevó una vida de rectitud y honestidad, sino que incluso criticó públicamente los malos hábitos que veía entre los círculos oficiales. No tuvo reparos siquiera para denunciar a la misma familia imperial. Muchos parientes imperiales, como Geng Bao, un tío por parte materna del emperador An de Han, o Yan Xian, hermano de la emperatriz, quisieron recomendar a sus familiares para desempeñar puestos oficiales. Pero Yang Zhen, sabiendo de su falta de moralidad y capacidad, siempre los rechazó lisa y llanamente.

Su extraordinaria conciencia moral y la forma de dirigir a su propia familia fue la noble herencia que legó a sus descendientes. Según recogen los registros históricos, su familia hizo gala de un comportamiento intachable durante cuatro generaciones. Su hijo, Yang Bing, vivió recluido en una aldea donde trabajó como maestro hasta que cumplió los cuarenta años, momento en el que comenzó su carrera oficial, con la misma determinación que su padre. En cierta ocasión, unos subordinados quisieron sobornarlo con una cantidad cuantiosa de dinero, y él «cerró la puerta sin aceptarlo, por pura rectitud». Tanto Yang Ci, que ejerció de gran comandante imperial, como todos los nietos de Yang Zhen, continuaron la tradición familiar manteniéndose incorruptibles y por ello su gran legado ha sido narrado una y otra vez durante siglos.

En la Séptima Sesión Plenaria de la XVIII Comisión Central para la Inspección Disciplinaria del PCCh, Xi Jinping quiso enfatizar esta idea: «Los líderes y cuadros del Partido deben enseñar esta conciencia incorruptible y ser por tanto insobornables. Solo siendo altamente conscientes es posible encontrar el lado correcto de la propia conducta». Y precisamente recurrió a la historia «El rechazo del oro por los cuatro testigos» y a la enseñanza que esta implica sobre el valor de un legado de rectitud, para ilustrar el profundo sentido de la conciencia en la vida social, profesional, cultural y moral del individuo. La conciencia nos permite distinguir el bien del mal, comprender la diferencia entre lo privado y lo público, y es también la herramienta de un partido para crear una atmósfera saludable evitando la perversidad. La conciencia es la «piedra angular» que pone a prueba la cualidad ideológica del individuo. Al encarar las contradicciones entre lo público y lo privado, lo justo y lo interesado, lo verdadero y lo falso, el mal y el bien, o la alegría y la amargura, solo de ella depende escoger el lado correcto.

LA LUCHA ANTICORRUPCIÓN NO ES HOUSE OF CARDS

Mientras seguimos profundizando en la lucha contra la corrupción, en nuestra sociedad han surgido un buen número de teorías que influyen o caldean la opinión pública. Algunas incluso se han hecho con un considerable mercado. Por ejemplo, hay quien defiende que la lucha anticorrupción no tiene nada que ver con el interés de los ciudadanos, que conduce a la pasividad de los funcionarios del Partido, que afecta al desarrollo económico, que es una mera lucha de poder, que debiera en todo caso implementarse gradualmente y demás ideas de esta índole. Contra estos discursos erróneos o confusos, hemos de aportar análisis claros que los denuncien y corrijan, disolver el ánimo negativo y deshacer malentendidos tendenciosos. Hemos de decir claramente que nuestra lucha contra la corrupción no es una élite de esnobs despreciando al pueblo ni tampoco una lucha de poder al estilo de House of Cards, y mucho menos, por supuesto, una suerte de «edificio inacabado» dejado a medias. Todo ello es crucial para profundizar en la construcción de una atmósfera favorable en la opinión pública respecto a la mejora de la conducta del Partido, la construcción de un gobierno limpio y la lucha anticorrupción.


[Discurso en la Sexta Sesión Plenaria de la XVIII Comisión Central del PCCh para la Inspección Disciplinaria (12 de enero de 2016).]

Comentario

House of Cards es una serie política que narra las peripecias de un congresista sin escrúpulos y de su mujer, tan ambiciosa como él, en su lucha cruenta por el poder y el dinero en la arena política estadounidense.

El protagonista de la serie, Francis Underwood, es un frío y calculador político sin apenas otras referencias: con la intención de hacer caer al que va a ser secretario de Estado, envía a un subordinado a beber y drogarse junto con un testigo con la intención de chantajearle luego; engaña al viejo y venerable ministro pretendiendo ser su leal colega para confabularse con el nuevo ministro de educación; coacciona a su subordinado exigiéndole una lealtad que poco después castiga según le conviene. En definitiva, un realismo muy crítico que ha reportado a la serie una inmensa audiencia y el aplauso general de la crítica.

Estrenada en febrero de 2013, la primera temporada de House of Cards captó la atención tanto del público como de los círculos políticos internacionales por su vívida descripción de los peligrosos juegos de poder y dinero en la política estadounidense. Tanto el expresidente Obama como el ex primer ministro británico Cameron confesaron abiertamente seguir la serie. En las elecciones presidenciales estadounidenses de 2016 hubo algunos episodios indecorosos que podían ser vistos como una encarnación real de lo que la serie describe. House of Cards continuó seis temporadas explorando las intrigas y el lado oscuro de las grandes corruptelas de la política occidental.

Por otro lado, Michael Dobbs, autor de la novela homónima en la que se basa la serie, es un gran conocedor de los círculos políticos occidentales, ya que él mismo hizo carrera en la política británica desde 1975. Fue jefe de personal y consultor del gobierno de Margaret Thatcher, y se retiró de la política siendo vicepresidente del partido conservador. En su novela hace uso de su propia experiencia «desde dentro», razón por la cual es tan vívida y realista. La prensa internacional es unánime al calificarla como «una historia incomparablemente provocativa, de un franco realismo, fascinante, que con fina ironía ridiculiza nuestro mundo actual, al tiempo que permite a la gente vivenciarlo en primera persona».

En la Sexta Sesión Plenaria de la XVIII Comisión Central del PCCh para la Inspección Disciplinaria, Xi Jinping recurrió a House of Cards para enfatizar que la lucha anticorrupción que lleva a cabo el PCCh no es el producto de una élite hambrienta de riqueza y poder, con sus intrigas y juegos de poder internos, ni tampoco constituye un «edificio inacabado» imposible de apuntalar. Hizo así un uso ingenioso de la popularidad de la serie para rebatir ciertas ideas erróneas que circulan entre la opinión pública, reafirmando con ello la firme disposición del partido que encabeza en la lucha contra la corrupción.

Esta no es la primera vez que Xi Jinping recurre a House of Cards como una metáfora válida de lo que no es ni debe ser la política del Partido. En visita oficial a Estados Unidos en 2015, un periodista le preguntó si acaso la lucha anticorrupción en China enmascaraba una lucha entre facciones (una lucha de poder), a lo que él repuso: «El gobierno investiga los casos de corrupción con extrema seriedad, insistiendo en perseguir tanto tigres como moscas, tal y como exige la gente. La lucha anticorrupción no es ningún House of Cards, y por supuesto no tiene nada que ver con juegos de poder». El presidente Xi, con su talento narrativo, utilizaba así ingeniosamente un símbolo de la cultura americana como respuesta a un tema sensible, ganándose el aplauso tanto del público presente como de los medios estadounidenses. Y su frase «La lucha anticorrupción no es ningún House of Cards» se ha convertido en una buena metáfora para expresar la firme determinación del Partido a la hora de rectificar sus acciones y luchar contra la corrupción.

LOS FRUTOS DEL TRABAJO DEL PUEBLO

La historia de Lankao nos ofrece el ejemplo de Boxing, un oficial famoso por su intachable conducta. Sirvió sucesivamente como gobernador provincial en las prefecturas de Fujian y Jiangsu y llegó a ser ministro de Ritos del imperio. Con el objeto de declinar de una vez por todas los obsequios que le llegaban de todas las instancias, escribió un pequeño alegato titulado Edicto contra los obsequios, donde decía: «Aunque un grano de arroz o un hilo de seda son diminutos, no dejan de afectar a mi reputación e integridad. Aunque un céntimo o un penique no valen nada, son no obstante fruto del trabajo del pueblo. Tratar con magnanimidad al pueblo lo hará generoso; obtener el mínimo provecho de la gente me hará indigno. ¿Quién puede decir que esta es la forma ordinaria de relacionarse, si el sentido del honor se ve gravemente perjudicado? Si esto no es aprovecharse, ¿qué es?». Considero que esto puede servirnos de espejo donde mirarnos.