Volume 150 pages
About the book
Probablemente no hay violencia que, por más vista o presenciada, por más que «solo puede ser buscada en el reino de los medios y no en el de los fines», no represente una dificultad a la hora de preguntar por su racionalidad. Crítica de la crueldad se sitúa en una categoría límite a la luz de esto: cuando el exceso de violencia invierte su propia lógica. Así, inútil y gratuita, la crueldad es un término incómodo respecto de cómo juzgarlo y entenderlo, sea en el marco de la soberanía o en la sociedad civil. Como crimen por placer que no responde a una causa comprensible, permanece impensada respecto de su fundamento, límite y razón. Serge Margel aborda este problema y lo hace a partir de las lógicas psíquicas de la crueldad y su relación con el poder soberano: una relación atravesada por la denegación que, al tiempo que resguarda la peculiaridad de dicha violencia desmedida, consolida la preservación de la soberanía; una soberanía que, al depender de la crueldad, se conforma en sus propios límites discursivos. Negar la crueldad no es solo fundamental para la coherencia política del ejercicio de la violencia, sino también para la linealidad histórica que la reviste de sentido. Por esta razón, discutir cómo las lógicas de la crueldad terminan por renegar y falsificar la escritura de la historia, y qué implica pensar la historia de la destrucción, empezaría entonces por no negar la huella política de la crueldad.