Versos Breves Sobre Ventanas

Text
Read preview
Mark as finished
How to read the book after purchase
Font:Smaller АаLarger Aa

3. POR UNA PARED BLANQUITA

Por una pared blanquita

un gusanito un día

corriendo allí estaba

pues muy rápido subía.

―¿A dónde vas gusanito?

De pronto se escuchó

alguien que está volando

hasta allí se acercó.

Ella era muy pequeña

y él que la ha mirado

de pronto la dice ―¡Mira!¡

Y ella se ha parado.

―¿A dónde quieres que mire? ―,

la mariposa decía.

El gusano la contesta

―La pared es solo mía.

―¿Qué quieres decir con eso? ―,

ella le está diciendo.

―Que no te pares aquí

que he de seguir corriendo.

―Pero ¿Dónde vas deprisa? ―,

ella le ha preguntado.

―Hasta el techo y luego vuelta―,

él así ha contestado.

―Pero ¿Qué estás diciendo

que todo vas a subir

¿Y Cuánndo llegues arriba? ―.

y se pone a reír.

―¿Que te ha hecho tanta gracia? ―,

el gusanito decía

al verla a ella reír

y ella le respondía.

―Pues si he oído bien

algo así he escuchado

que cuando llegues al techo

de nuevo vas para abajo.

―Claro, no creas que soy tonto―,

el pequeño contestaba.

―¿Qué voy a hacer yo allí?―,

ella muy seria se quedaba.

―Entonces ¿Para qué subes

si vas a acabar bajando? ―,

pregunta la mariposa

que se marchaba volando.

―Así hago ejercicio

¿Por qué?, ¿Te parece mal?

¿Te digo yo que no vueles? ―,

y se vuelve a callar.

Pero ya la mariposa

escucharle no podía

mucho se ha separado

por la ventana salía.

Y el pequeño trepando

por la pared va subiendo

y cuando llegue al techo

la bajará él corriendo.

AMOR

4. VOLANDO MUY DISTRAÍDA

Volando muy distraída

una mariquita estaba

de pronto llegó el aire

y a ella le arrastraba.

Por una ventana abierta

por allí que se coló

y encima de una mesa

enseguida ella se vio.

Del susto se ha repuesto

pues mucho miedo pasaba

cuando el viento inesperado

la arrastró y se la llevaba.

Ahora está mirando

el sitio no conocía

pero de pronto lo ve

algo que le atraía.

Un olorcillo agradable

que ella no conocía

pero como es curiosa

a verlo se acercaría.

Es una cosa muy grande

no sabía lo que era

nunca lo había visto

esa es su vez primera.

Volando se ha subido

y encima se posaba

las patitas se han hundido

y otra vez se asustaba.

―¡Que día que voy teniendo!

―la mariquita pensaba―,

antes me arrastraba el viento

y ahora, ¿Qué pasaba?

Mirando por todos lados

todo blanquito veía

de pronto lo ha probado

que rico le parecía.

Comiendo la mariquita

un ratito ya llevaba

cuando oye un chillido

y muy quieta se quedaba.

Era un niño que la vio

y chillando él decía

―Un bicho, mamá un bicho―,

y tocarle pretendía.

La mamá que le ha escuchado

enseguida se acercó

―No la toques ten cuidado

que la quito de ahí yo.

―Quita pequeña―, decía

la mamá allí al lado

y con un dedo la da

y ella se ha volado.

Sobre el dedo se ha subido

no sabía lo que hacer

pues aquello que ha comido

no lo quería perder.

Está en el dedo un poquito

y de nuevo volverá

a la comida tan rica

que mucho le gustará.

―Mamá es mi polvorón

―el niño así decía―,

el bicho lo está comiendo.

Y espantarle pretendía.

―Déjale ya te doy otro

―la mamá le ha contestado―,

que se lo coma tranquila

parece que le ha gustado.

―Pero el polvorón es mío

―el pequeño está diciendo―,

mira te doy otro igual.

Lo coge y sale corriendo.

La mariquita comió

todo lo que ella quería

y después se fue volando

por la ventana aquel día.

AMOR

5. POR UNA VENTANA ABIERTA

Por una ventana abierta

volando él ha entrado

es la hora de la siesta

un rinconcito ha buscado.

Sudando así venia

y se quiere refrescar

pues mucho calor hacia

fuera de ese lugar.

En silencio quietecito

mucho tiempo ya llevaba

es un paciente mosquito

él así lo demostraba.

No quería molestar

pues él muy bien lo sabía

que si se mueve hace ruido

y de allí le echarían.

Fresquito está el sitio

en donde se ha parado

sigue quieto el mosquito

un rato ha descansado.

Un ojito está abriendo

así él comprobará

si alguien le está viendo

y quieto él seguirá.

Pero nadie ha entrado

en toda la habitación

por eso él ha volado

una gran vuelta se dio.

Las patitas, ha estirado

pues las tenía dormidas

y batiendo las alitas

va desde abajo arriba.

Así bien lo está pasando

cuando un ruido escuchó

a su rincón se ha marchado

quietecito se quedó.

Alguien había entrado

en aquella habitación

pero ni se ha enterado

del mosquito en el rincón.

Por qué él muy quietecito

en su rinconcito estaba

así nadie le verá

y tranquilo descansaba.

AMOR

You have finished the free preview. Would you like to read more?