Derechos fundamentales

Text
Read preview
Mark as finished
How to read the book after purchase
Derechos fundamentales
Font:Smaller АаLarger Aa

Publicación

editada

en el Perú

por Palestra Editores


Cultura Paracas (entre los años 700 a.C. y 200 d.C.,)

DERECHOS FUNDAMENTALES

Actas de las V Jornadas Nacionales de Derechos Fundamentales


DERECHOS FUNDAMENTALES

Actas de las V Jornadas Nsacionales de Derechos Fundamentales

César Landa Arroyo

(Editor)

Primera edición Digital, septiembre 2020

© 2020: César Landa Arroyo

© 2020: Palestra Editores S.A.C.

Plaza de la Bandera 125 Lima 21 - Perú

Telf. (511) 6378902 - 6378903

palestra@palestraeditores.com

www.palestraeditores.com

Diagramación y Digitalización:

Gabriela Zabarburú Gamarra

ISBN Digital: 978-612-325-139-0

Todos los derechos reservados. Queda prohibida la reproducción total o parcial de esta obra, bajo ninguna forma o medio, electrónico o impreso, incluyendo fotocopiado, grabado o almacenado en algún sistema informático, sin el consentimiento por escrito de los titulares del Copyright.

CONTENIDO

PRÓLOGO

LA PARLAMENTARIZACIÓN DEL PRESIDENCIALISMO PERUANO

Milagros Campos

I. Introducción

II. Gobernar sin mayoría

III. El debate sobre el presidencialismo latinoamericano

IV. Propuestas para el debate de una reforma del sistema de gobierno peruano para optimizar la gobernabilidad democrática

V. Función legislativa

VI. Reflexión final y conclusiones

Bibliografía

CONTROL Y BALANCE DE PODERES

La cuestión de confianza y la disolución del Congreso Peruano

César Landa Arroyo

I. Introducción

II. El conflicto entre el Gobierno y la oposición

III. La cuestión de confianza

IV. La disolución Constitucional del Congreso

V. Conclusiones

BIBLIOGRAFÍA

PROBLEMAS DE FONDO Y COYUNTURALES DE LA PROHIBICIÓN CONSTITUCIONAL DE LA REELECCIÓN INMEDIATA DE CONGRESISTAS EN EL CONTEXTO DE LA PANDEMIA DEL COVID-19

Eddie R. Cajaleón Castilla

I. Introducción

II. La prohibición de la reelección inmediata

III. Su concepto y tipos

IV. La perpetuación en el poder: falta de renovación de la clase política

V. La corrupción política

VI. La responsabilidad política: renovación o negación de la confianza

VII. El derecho de sufragio pasivo, la reelección y la prohibición del referéndum

VIII. Las medidas estatales contra el COVID-19 y las elecciones

IX. La disolución del congreso y convocatoria de elecciones

X. El caso de los congresistas con mandato parlamentario extinguido, y miembros de la comisión permanente, en las elecciones para período 2020-2021

XI. El caso de los congresistas 2016-2021 y 2016-2019 y las elecciones para período 2021-2026

XII. El caso de los congresistas miembros de la Comisión Permanente 2016-2020 reelegidos para 2020 y 2021, y las elecciones para el período 2021-2026

XIII. El caso de los congresistas 2020-2021 y las elecciones para período 2021-2026

Bibliografía

¿SON LAS FIRMAS DE ADHERENTES UN VERDADERO PELIGRO PARA LOS DERECHOS POLÍTICOS EN EL PERÚ?

Diego Alonso Pomareda Muñoz

I. Introducción

II. Democracia y participación

III. Mecanismos participativos de alcance nacional que se encuentran supeditados a las firmas de adherentes

III.A. Iniciativa legislativa popular

III.B. Referéndum popular

IV. Mecanismos participativos de alcance subnacional que se encuentran supeditados a las firmas

IV.A. Revocatoria de autoridades

IV.B. Rendición de cuentas

IV.C. Otros mecanismos participativos de orden subnacional

V. Las firmas de adherentes y la restricción del ejercicio de los derechos políticos

VI. Reflexiones finales

Bibliografía

EL DERECHO A LA PROTESTA DURANTE LA PANDEMIA DE COVID-19

Apuntes desde el caso peruano

Rosa Isabel Sánchez Benites

I. Una revisión panorámica de la protesta en tiempos de pandemia

II. Protestas y estado de emergencia en el Perú

III. El alcance de la limitación de derechos fundamentales durante el estado de emergencia en la Constitución peruana de 1993

IV. El derecho a la protesta y el estado de emergencia

V. Conclusiones

Bibliografía

EL ROL DEL SELECCIONADOR

Mosi Marcela Meza Figueroa

I. Introducción

II. Un recuento necesario

III. Una mirada a otras realidades

IV. Fórmulas y cuestionamientos

V. Una propuesta complementaria

Bibliografía

LA JUSTICIA CONSTITUCIONAL Y SU LEGITIMIDAD EN EL PERÚ

El carácter político de las controversias constitucionales y los desafíos derivados de la convergencia entre los procesos de constitucionalización y convencionalización del derecho

 

Juan Carlos Díaz Colchado

I. Introducción

II. Las concepciones sobre la justicia constitucional en sus orígenes emblemáticos: de Marshall y Kelsen

III. La legitimidad de la justicia constitucional: breve síntesis de argumentos

IV. Las tensiones políticas en casos judiciales emblemáticos

V. La progresiva convergencia de los procesos de constitucionalización y convencionalización del ordenamiento como desafío a la justicia constitucional

VI. Conclusiones

Bibliografía

LA JUDICIALIZACIÓN DE LA POLÍTICA Y EL PROTAGONISMO DEL TRIBUNAL CONSTITUCIONAL

A propósito de los retos de la justicia constitucional en las políticas públicas en tiempos de pandemia

Devora Franco Garcia

I. Introducción

II. El protagonismo judicial en el marco del neoconstitucionalismo

III. La judicialización de la política y el control de la constitucionalidad

IV. Retos de la justicia constitucional sobre políticas públicas en materia de derechos sociales en tiempos de pandemia

V. Conclusiones

Bibliografía

DERECHOS FUNDAMENTALES Y EMPRESAS

Carlos López-Hurtado

I. Introducción

II. La aplicación de los derechos humanos a las empresas

III. La responsabilidad de respetar los derechos humanos, la debida diligencia empresarial y el derecho a la reparación

IV. Responsabilidad de los estados de origen y la extraterritorialidad

V. Comentarios finales

Bibliografía

EL DERECHO A LA DESCONEXIÓN DIGITAL

Entre el derecho al descanso y los deberes laborales

Edwin Figueroa Gutarra

1. Introducción

II. El derecho al descanso, los deberes laborales y la tecnología

III. Un esbozo de definición sobre el derecho a la desconexión digital

IV. Las experiencias sobre desconexión en Francia y España

V. ¿Implementar el derecho a la desconexión digital en latinoamérica?

VI. Buscando un punto de equilibrio entre la desconexión digital y los deberes laborales

VII. Conclusiones provisorias

Bibliografía

EL PRINCIPIO DE SOLIDARIDAD EN LA CONSTITUCIÓN ECONÓMICA

Alcances del principio durante la pandemia

Milagros A. Revilla Izquierdo

I. Introducción

II. La COVID-19 y las consecuencias en la política económica de los Estados

III. La constitución económica y el principio de solidaridad en virtud de la jurisprudencia del Tribunal Constitucional peruano

IV. El principio de solidaridad y la COVID-19

IV. Conclusiones

JUSTICIAS SUMERGIDAS Y LAS ALTAS CORTES

Las tradiciones jurídicas indígenas visitan los tribunales

Álvaro R. Córdova Flores

I. Introducción

II. El caso Delgamuukw: historias orales indígenas

III. Corte Donstitucional sudafricana y la jurisprudencia del ubuntu

V. Jueces y la fusión de horizontes

Bibliografía

COVID-19 Y SU IMPACTO DIFERENCIADO EN LOS DERECHOS RELIGIOSOS DE LOS PUEBLOS INDÍGENAS EN EL PERÚ

Notas a partir de la jurisprudencia de la Corte Interamericana de Derechos Humanos

Trilce Valdivia Aguilar

I. Introducción

II. El derecho a la libertad religiosa de los pueblos indígenas en la jurisprudencia de la Corte IDH

III. COVID-19 y pueblos indígenas: la respuesta del Estado peruano

IV. Valoración crítica de las medidas adoptadas por el Estado peruano

Bibliografía

Prólogo

El Área de Derecho Constitucional (ADC) de la Pontificia Universidad Católica del Perú, como cada año, viene desarrollando sus actividades académicas en el marco de la normalidad, pero también de la anormalidad de la vida constitucional del Perú, que no es ajena a temas de estudios comparados de los países —no solo de la región— que atraviesan problemas constitucionales provocados por la pandemia del COVID-19 en el mundo.

Particularmente en el Perú, durante el último año, el control y balance de poderes se transformó vertiginosamente en un conflicto de poderes de suma cero, en el que el éxito de la oposición parlamentaria era la derrota de la política anticorrupción del Gobierno, mediante interpelaciones y censuras ministeriales, y, en última instancia, procurando la vacancia presidencial; mientras que el éxito del Gobierno constituía el levantamiento de la inmunidad parlamentaria, la no reelección parlamentaria, y, por último la materializada disolución del Congreso.

Todo ello tuvo un alto costo no solo político, sino también social. Ello debido a la incertidumbre ciudadana generada por la polarización política alentada por algunos poderes fácticos y sus voceros que, para salvaguarda de la madurez democrática del país, no solo se saldó con el beneplácito popular de la clausura del Congreso, sino también, con la convalidación por el Tribunal Constitucional de la disolución constitucional del Congreso. Ello es encomiable, debido a que desde hace décadas no es el golpe militar o civil el que resuelve los problemas de una democracia constitucional en proceso de maduración, sino la justicia constitucional.

Por ello, las V Jornadas Nacionales de Derechos Fundamentales, realizadas en Lima del 24 al 26 de septiembre de 2020, tienen como temática el estudio teórico y práctico de la parte orgánica de la Constitución, no exenta de su vinculación de los derechos fundamentales, no solo políticos, sino también sociales.

De allí, que, organizados en seis mesas temáticas, se han expuesto ponencias que integran esta obra en los rubros que se señalan en los siguientes párrafos.

En la Mesa temática N° 1, “Relaciones Parlamento – Poder Ejecutivo”, la Profesora Milagros Campos presenta el tema de la parlamentarización del presidencialismo peruano; mientras que el suscrito analiza en el marco del control y balance de poderes, la cuestión de confianza y la disolución del Congreso Peruano.

En la Mesa temática N° 2, “Derechos políticos y régimen electoral”, el Profesor Eddie Cajaleón reflexiona sobre los problemas de fondo y coyunturales de la prohibición constitucional de la reelección inmediata de congresistas en el contexto de la pandemia del COVID-19; Diego Pomareda plantea si las firmas de adherentes constituye un verdadero peligro para los derechos políticos en el Perú; e Isabel Sánchez aborda el derecho a la protesta durante la pandemia de COVID-19: apuntes desde el caso peruano.

En la Mesa temática N° 3, “Selección de magistrados”, la Profesora Mosi Meza aborda el tema del rol de la Junta Nacional de Justicia como el ente seleccionador de los jueces.

En la Mesa temática N° 4, “Judicialización de la política y tutela”, el Profesor Juan Carlos Díaz aborda el tema de la justicia constitucional y su legitimidad en el Perú: el carácter político de las controversias constitucionales y los desafíos derivados de la convergencia entre los procesos de constitucionalización y convencionalización del derecho; mientras que la Profesora Dévora Franco reflexiona sobre la judicialización de la política y el protagonismo del Tribunal Constitucional, a propósito de los retos de la justicia constitucional en las políticas públicas en tiempos de pandemia.

En la Mesa temática N° 5, “Derechos fundamentales y empresa”, el Doctor Carlos López-Hurtado, analiza la relación entre los derechos fundamentales y las empresas; el Profesor Edwin Figueroa estudia el derecho a la desconexión digital, entre el derecho al descanso y los deberes laborales; y la Profesora Milagros Revilla Izquierdo reflexiona sobre el principio de solidaridad en la Constitución económica y los alcances de dicho principio durante la pandemia.

En Mesa temática N° 6, “Derecho constitucional indígena”, el Profesor Álvaro Córdova analiza a las Altas Cortes y las tradiciones jurídicas indígenas; y. por último, la profesora Trilce Valdivia nos presenta sus reflexiones sobre el COVID-19 y su impacto diferenciado en los derechos religiosos de los pueblos indígenas en el Perú, formulando notas a partir de la jurisprudencia de la Corte Interamericana de Derechos Humanos.

De esta forma, el ADC mantiene el estándar académico asumido en los últimos años de tener publicado el libro con las ponencias de la Jornada Nacional de Derechos Fundamentales para conocimiento y adquisición del público asistente e interesado; el mismo que, debido al gravísimo impacto de la pandemia del COVID-19, se edita en forma digital (e-book). Asimismo, al no haber podido descentralizar nuestra actividad como estaba previsto desde finales del año pasado, debido a la situación de emergencia sanitaria, la Jornada se lleva a cabo de forma virtual, mediante la plataforma digital, como acontece de forma ya no tan extraordinaria en la labor docente educativa.

 

Ello no hubiera sido posible sin el valioso apoyo del Profesor Juan Carlos Díaz, entusiasta colaborador y preclaro doctorando, así como del decidido patrocinio en medio de las circunstancias de Palestra Editores, con los cuales nos encontramos agradecidos.

Lima, 24 de setiembre de 2020

César Landa Arroyo

Coordinador

Área de Derecho Constitucional

La parlamentarización del presidencialismo peruano

Milagros Campos*

* Profesora de la Pontificia Universidad Católica del Perú.

I. INTRODUCCIÓN

Desde su independencia, el Perú inauguró un presidencialismo que se apartaba del modelo clásico norteamericano (Villarán, 1994 ). La incorporación de instituciones parlamentarias en el diseño del sistema de gobierno ha sido una tendencia constante en las doce constituciones que ha tenido el país, procurando con ello moderar el poder del presidente (García Belaunde, 1991; Ramírez del Villar, 1996; García Toma, 1998; García Belaunde, 2006; Eguiguren Praeli, 2007).

En doscientos años de vida republicana, los ciclos democráticos en el Perú no han sido mayores a veinte años. A pesar de la parlamentarización del presidencialismo peruano, la preeminencia del Ejecutivo en los periodos democráticos se mantuvo. Los estudios lo refieren desde una mirada crítica (Belaunde, 1931 y 1987; García Belaunde, 1991; Fernández Segado, 1998; Bernales Ballesteros, 1989), como una característica propia del presidencialismo (Pareja Paz Soldán, 1984) o como consecuencia de poderes vinculados con la cultura política, la personalidad de los presidentes y el contexto de partidos políticos débiles (Campos, 2014).

II. GOBERNAR SIN MAYORÍA

Cuando se gobernó con mayorías durante el siglo XX, el control parlamentario fue insuficiente1; mientras que sin mayoría parlamentaria2, los golpes de estado interrumpieron períodos de gobierno. Entre 2001 y 2016, los gobiernos carecieron de mayorías parlamentarias, pero impidieron una coalición opositora. Los tres presidentes lograron concluir sus mandatos. Algunos estudios habían pronosticado el triunfo del Ejecutivo en escenarios catastróficos de conflicto3, otros más bien daban cuenta de ejecutivos acorralados que podrían terminar destituidos como había ocurrido en otros países de la región.

Grafico N° 1

Porcentaje de escaños del partido en el gobierno


Fuente: JNE. Congreso de la República. Elaboración propia

Dos experiencias inéditas en el Perú llegaron con las elecciones de 2016. La primera, el triunfo de Pedro Pablo Kuczynski en segunda vuelta, con un Congreso electo en la fecha de las elecciones generales. El Ejecutivo lograría 14% de escaños, mientras que Fuerza Popular, que perdió las elecciones, obtuvo el 56% de escaños. Interpelaciones, censuras y votos de confianza denegados, fueron el escenario previo a la renuncia del Presidente Kuczynski, después de librar un proceso de vacancia por permanente incapacidad moral. Martín Vizcarra, que ocupaba la Vicepresidencia, asumió la Presidencia. En medio de un escalamiento de conflictos con el Congreso, su gabinete presenta una cuestión de confianza que, al considerarla denegada, habilita la primera disolución del Congreso, convocando a elecciones parlamentarias extraordinarias. A la fecha, el Presidente gobierna no sólo sin mayoría sino sin una bancada de gobierno. Un hecho extraordinario se suma a este complicado escenario, la pandemia del COVID-19, que ha planteado retos no sólo a las personas en el ámbito personal, familiar y laboral, sino en su condición de ciudadanos, pues la restricción de derechos y las deficiencias en el acceso a otros, demandan respuestas del Estado. Es en ese contexto en el que analizamos la relación Ejecutivo-Legislativo.

El artículo aborda en una primera parte un breve repaso del debate sobre las dificultades del presidencialismo latinoamericano, en el que se enmarca el diseño del sistema de gobierno peruano, para garantizar estabilidad política y gobernabilidad democrática. En una segunda parte, se plantean para el debate algunos ajustes al sistema de gobierno. No son los únicos, pero empezamos por plantear: 1) permitir la reelección parlamentaria entre otras razones para dar un adecuado contrapeso al Ejecutivo con parlamentarios que tengan experiencia; 2) eliminar el llamado voto de investidura, manteniendo la exposición y debate del gabinete en el Congreso, pero eliminando el voto; 3) buscar mecanismos para racionalizar la censura ministerial; 4) la disolución contrapeso y control de los decretos de urgencia en congreso unicameral; 5) insistir en el retorno a la bicameralidad para mejorar la representación y la deliberación; 6) revisar la regulación de la insistencia de proyectos observados por el Ejecutivo. Finalmente, una reflexión sobre los desafíos en el control y balance de poderes en el contexto del COVID-19.

III. EL DEBATE SOBRE EL PRESIDENCIALISMO LATINOAMERICANO

El presidencialismo latinoamericano, que en mayor o menor medida se apartó del modelo clásico norteamericano, ha sido el centro del debate sobre la inestabilidad política en la región. Sin minimizar las razones que tienen su origen en factores económicos, sociales e histórico-culturales (Lipset, 2016; Adam Przeworski , 2016; Carpizo, 2007), nos vamos a referir al análisis del diseño institucional como causa de la inestabilidad política (Josep Colomer y Gabriel Negretto, 2003; Córdova, 2007; Nogueira, 2015).

En el debate, diversos estudios han puesto énfasis en la tendencia del presidencialismo a concentrar poderes en una persona, el presidente y lograr una democracia estable. Para Linz los problemas se encuentran en: “a) la legitimidad democrática dual, del presidente y del congreso; b) la probabilidad de conflicto y la ausencia de mecanismos obvios para resolverlo; c) el carácter de suma cero de las elecciones presidenciales; d) la implicación mayoritaria que puede llevar a la desproporcionalidad, e) la polarización potencial; f) la rigidez de los mandatos fijos”, poco apta para la política democrática de la negociación e incapaz de enfrentar situaciones de crisis (Linz, 1997). Esas características del presidencialismo establecerían incentivos para estrategias no cooperativas entre los actores políticos y de ello derivarían situaciones de bloqueo institucional que podrían degenerar en intervenciones militares y propiciar el derrumbe de la democracia (Linz, 1994).

Otras críticas señalan que siendo el origen y la supervivencia de Ejecutivo y Legislativo independientes, los sistemas presidenciales carecen de mecanismos institucionales que incentiven conductas cooperativas. La fuente del conflicto sería institucional (Figueiredo y Limongi, 2000). La falta de flexibilidad y de armonización de mayorías parlamentarias y Presidente de la República ocasiona que las mayorías parlamentarias condicionen la realización del programa de gobierno que requiere desarrollo legislativo o lo bloqueen. Si la oposición mayoritaria “no está disponible para negociar con el gobierno”, pueden desarrollar una oposición obstruccionista de desgaste gubernamental con el objeto de asumir más tarde el gobierno, el sistema político se bloquea y paraliza, crisis que carece de solución constitucional”, con el consiguiente peligro de crisis del sistema político institucional (Nogueira, 2017). Otros estudios señalan que el presidencialismo en sistemas multipartidistas con un Congreso electo por representación proporcional alienta la crisis de gobernabilidad y el culto a la personalidad (Ackerman, 2007).

Los estudios de Shugart y Carey sugirieron considerar dos variables: las facultades legislativas de los presidentes y el apoyo de los partidos con representación parlamentaria. (Shugart y Carey, 1992); Nohlen incorpora la interrelación entre sistema de gobierno, sistema electoral y sistema de partidos y sus variables que deben ser consideradas en el análisis de los problemas del presidencialismo (Nohlen, 1999) Manwaring y Shugart analizan diversos sistemas presidencialistas en la región en función del número de partidos y su disciplina. (Mainwaring y Shugart, 2002) Negretto apunta a reformas en el sistema electoral para evitar los problemas de gobernabilidad en los regímenes presidenciales en gobiernos divididos (Negretto, 2003). Otros estudios muestran que el presidencialismo puede tener un buen despeño si funciona con mayoría o coaliciones y adecuados controles. Lanzaro y Chasquetti en defensa del presidencialismo muestran que los presidencialismos multipartidistas pueden mantener la estabilidad democrática, siempre y cuando se formen coaliciones de gobierno. (Lanzaro, 2001).

Otra respuesta a las críticas al presidencialismo se ha encontrado en la parlamentarización de los regímenes presidenciales (Colomer y Negretto, 2005; Fix-Fierro y Salazar-Ugarte, 2012; García Roca, 2016). García Roca señala que los presidencialismos iberoamericanos llevan tiempo parlamentarizándose como un remedio para frenar el hiperpresidencialismo. La tendencia hacia la parlamentarización implica ampliar la capacidad de la legislatura para controlar al ejecutivo. Ello incluye involucrar al parlamento en el nombramiento y remoción de los miembros del gabinete y así fortalecer los poderes de control con informes periódicos o, ampliar su intervención en la elaboración de políticas públicas. Fix-Fierro anota que incluso en los casos en que el presidente renunció o fue destituido de su cargo, la democracia no se derrumbó y la crisis se manejó de alguna manera por medios pacíficos e institucionales (Fix-Fierro y Salazar-Ugarte, 2012).

El sistema de gobierno peruano se forjó desde el siglo XIX con una paulatina parlamentarización. El camino de la parlamentarización del presidencialismo no desnaturaliza el presidencialismo (Sartori, 2003) que por lo demás no surge nítidamente de los textos, sino de la realidad política cotidiana (García Belaunde, 1991). Se aprecia una cierta «parlamentarización» del sistema de gobierno, pero no pueden conducirnos a olvidar que el Presidente de la República tiene siembre la última decisión sobre los asuntos de gobierno (Fernández Segado, 1994). No vamos a realizar una historia de ese proceso que ha sido ampliamente estudiada. En los apartados siguientes expondremos algunos aspectos de este presidencialismo parlamentarizado a fin de reflexionar sobre los ajustes que con el propósito de optimizar la gobernabilidad democrática.

IV. PROPUESTAS PARA EL DEBATE DE UNA REFORMA DEL SISTEMA DE GOBIERNO PERUANO PARA OPTIMIZAR LA GOBERNABILIDAD DEMOCRÁTICA

En el marco de las IV Jornada Nacional sobre Derechos Fundamentales planteaba una reflexión en torno al diseño institucional de los sistemas de gobierno, a fin de procurar construir herramientas que contribuyan a consolidar la democracia constitucional. La estabilidad política resulta de condiciones sociales, pero en la política supone acuerdos y arreglos institucionales, así como políticas consensuadas. A continuación, presento los temas para la consideración en el debate.

4.1. Reelección Parlamentaria

Revertir la modificación en torno a la reelección parlamentaria inmediata a fin de favorecer la carrera política y permitir que el parlamentario se responsabilice ante sus electores por la gestión. La reelección parlamentaria debe entenderse también como un contrapeso para el ejecutivo.

Si bien no hay un derecho constitucional a la reelección4, la reelección parlamentaria tiene múltiples beneficios para el sistema político: favorece la carrera política, la profesionalización en el cargo a partir de la experiencia, brinda incentivos para una mejor gestión y facilita la rendición de cuentas. La reelección de permite que los parlamentarios “respondan ante sus electores”, “gocen de cierta independencia respecto a las burocracias partidistas y del propio Poder Ejecutivo” (Carpizo 2009). La presencia de políticos con experiencia facilita la negociación y el acuerdo entre los actores (Valencia Escamilla, 2009). La prohibición de la reelección parlamentaria “genera mayores alicientes para el amaterurismo político y la fluidez partidaria” (Steven Levitky y Mauricio Zavaleta, 2019). Frente a estos argumentos hay posiciones que destacan la alternancia.

En esa misma línea se pronunció a Comisión Europea para la Democracia a través del Derecho — Comisión de Venecia. Un legislativo experimentado está en mejores condiciones de ejercer su función de control político; el legislativo tiene, al ser colegiado, partidos de oposición, y finalmente, el trabajo parlamentario se desarrolla con la mayor apertura y transparencia. Aun cuando hay una tendencia a limitarla5, la propia comisión señala que al menos deberían permitirse dos términos consecutivos, a fin de que la renovación sea gradual, garantizando la continuidad y preservando la necesidad de rendir cuentas al electorado (European Commission for Democracy though Law, 2019).

Grafico N°2

Reelección parlamentaria en el Perú


Como puede observarse en el gráfico la tasa de reelección en Perú es baja comparada con otros países de la región y Estados Unidos. Desde el 1939 ha sido de 19%; entre 2001 y 2016, 22% en promedio.

4.2. Mecanismos de control

Los mecanismos de control entre ejecutivo y legislativo determinan el sistema de gobierno de cada país. La parlamentarización de nuestro presidencialismo se manifiesta inicialmente en incorporar el refrendo ministerial, los informes de ministros al parlamento, la censura ministerial y, más adelante, la interpelación, así como otros mecanismos de control parlamentario ajenos al presidencialismo puro. Algunos se enraizaron en las prácticas parlamentarias sin tener un marco legal claro; otros, como la estación de preguntas, incorporada en la Constitución de 1993, no han sido de una práctica regular. De hecho, la última convocada se llevó a cabo en el año 2012, por lo que se ha afirmado que “no ha tenido ninguna relevancia” (García Belaúnde, 2008).

La Constitución de 1828 estableció que los ministros darán razón a cada cámara del estado de su respectivo ramo. La relación de los ministros con el Congreso ha sido frecuente, aunque no siempre amistosa, pero son ellos los que tienen a su cargo la relación con el Congreso (Villarán M., 1994). Víctor Andrés Belaunde explicaba esta relación como una de cooperación: El parlamento para eficacia en su labor necesita conocer los problemas planteados exhaustivamente con antelación y sin prejuicios por los organismos técnicos del ejecutivo (Belaunde, 1987). A su turno, Villarán las clasificó en relaciones de colaboración y de fiscalización. El control al Ejecutivo se ha realizado a través de sus ministros. Este ha sido tanto preventivo, funcional y represivo (Landa Arroyo, 2004), como un claro reflejo de la relación ejecutivo - legislativo. En efecto, si bien ya no existe la costumbre de ir a sustentar memorias, sí son frecuentes las invitaciones a comisiones para informar respecto de las políticas del sector, para sustenta proyectos de ley, así como para cumplir con informar sobre temas específicos por mandato legal6.

4.3. Cuestión de confianza

Manuel Vicente Villarán da cuenta que diputados del 95 desestimaron votar el programa de gobierno. Sin embargo, ya la Constitución de 1933 había incorporado en el artículo 167 la obligación del “Presidente del Consejo al asumir sus funciones” de concurrir “a la Cámara de Diputados y al Senado, separadamente, en compañía de los demás Ministros” a exponer la política general del Poder Ejecutivo. Se suspendió su vigencia hasta que se constituya el Senado. El autor critica la imprecisión en la que habría incurrido la redacción del texto respecto de la procedencia o no de un voto, así como la interpretación favorable a someter a aprobación el programa del gabinete, pues importaría “una alteración sustancial” del sistema político. “El jefe de Estado habría perdido la libertad de que goza en las elecciones de sus consejeros; los gabinetes serían obra del Congreso no el Presidente”. “Se había entrado de lleno en la ruta del régimen parlamentario” (Villarán M. , 1994 ). La Constitución de 1979 mantuvo la obligación del Presidente del Consejo ante las Cámaras reunidas en Congreso, en compañía de los demás Ministros para exponer y debatir el programa general del Gobierno y las principales medidas políticas y legislativas que requiere su gestión, pero precisó que la exposición no da lugar a voto del Congreso. Es la Constitución de 1993 la que incorpora el voto.