La Sonrisa de Benito

"La sonrisa de Benito" son en realidad siete sonrisas, siete cuentos escritos a partir de la lectura de los «Apuntes para mis hijos» que nos dejó el Presidente Benito Juárez García. Una forma de acercarse a la historia del propio Benito Juárez de una manera no tan seria ni tan solemne, incluso tal vez, hasta un poquito irreverente. Su primer sonrisa de satisfacción, cuando se escapa de su natal Guelatao, para irse a la Ciudad de Oaxaca. Su segunda sonrisa de satisfacción, cuando logra entrar al Seminario, porque sabe que con eso puede ser alguien que aprenda más cosas. Su tercera sonrisa viene cuando recuerda aquel momento en que ya mero lo ordenan sacerdote, pero se logra librar y sigue la ruta de la enseñanza laica. Su cuarta sonrisa es amarga, es el recuerdo de una gran derrota. La Iglesia pasa por encima de él y de muchos otros ciudadanos. Su quinta sonrisa es de dolor, cuando muere su hija Guadalupe y toma la decisión de hacer cumplir la ley, no la enterrará en la iglesia, sino en el panteón civil, a pesar de las lágrimas de su esposa Margarita. Su sexta sonrisa es la del que no se dobla. El Presidente Santa Anna lo manda al destierro, no sin antes someterlo a vejaciones, que Benito aguanta con gran entereza, lo cual tal vez contagia a algunos que ya piensan en rebelarse contra el presidente Santa Anna. Su séptima sonrisa es la del que llega a la Presidencia de la República y tiene un futuro por delante.